Casa Rural Landaburu Borda
Jordi Hidalgo Tané
- Año de finalización: 2019
- Localización: Bera, Navarra, España
- Producto: Suelos de interior
- Tono de madera: Country Oak
- Soluciones: Interiores, Mobiliario
- Tipo de obra: Hostelería, Residencial
- Fotografía: José Hevia
Todo proyecto habitable, como la Casa Rural Landaburu Borda, es fruto de una ilusión y de una buena razón. Su promotor y propietario, Gorka Ibargoyen, encontró este centenario caserío rodeado de bosque en el valle de Bera en Navarra, una construcción y un lugar que le parecieron propicios para un proyecto de alojamiento vacacional en el que es posible desconectar de todo aquello que queda más allá del bosque que lo envuelve y lograr reconectar con el entorno natural.
Para hacer realidad su proyecto, Gorka Ibargoyen se ha aliado con el arquitecto Jordi Hidalgo Tané y entre ambos han logrado hacer realidad el concepto que ha dado origen a esta casa rural: crear un fructífero diálogo entre lo viejo y lo nuevo, lo ancestral y lo moderno, la artesanía y la tecnología, para construir un hábitat contemporáneo cargado de futuro.
El caserío original, construido con piedra y con vocación de durar en el tiempo, se ha respetado para que su presencia hable de una herencia valiosa, de una tradición edilicia y cultural que dialogue con el nuevo proyecto y lo enriquezca. La nueva construcción, en la que se aloja la zona de día, se une a través de un túnel de cristal al viejo caserío. Este nuevo volumen se “esconde” bajo un talud en el que crece la vegetación, de manera que no invade el entorno natural ni se impone a la construcción original. Pasado y presente unidos por un vínculo invisible.
La madera es la materia prima que vincula la casa con el entorno, el frondoso bosque de robles que protege la casa y la provee de oxígeno y vida. En Landaburu Borda, los productos PARKLEX PRODEMA han tenido un gran protagonismo en diversas intervenciones del interior por su calidad material, su fácil instalación y la resistencia a la humedad y al uso intensivo. El roble natural que se ha elegido para el acabado de estos productos cubre paramentos verticales y horizontales, suelos y techos, configura el mobiliario de la cocina y transforma la ducha en una experiencia única, consiguiendo, además, que el interior derroche coherencia estilística.
Bajo la apariencia natural del roble, cuidadosamente elegido, las distintas capas que configuran el producto esconden un proceso tecnológico, fruto de la investigación y la creatividad, que compatibiliza las virtudes de la madera, su tacto y calidez naturales, con los requisitos técnicos para una buena instalación.
Landaburu Borda es un buen ejemplo de que cuando la industria se alía con el diseño y la arquitectura se cumple el principal objetivo de estas actividades: mejorar la vida de las personas a través de la eficiencia y la creatividad.
El proyecto Landaburu Borda ha resultado finalista en los Premios FAD 2020. dentro de la categoría de Arquitectura. El jurado ha destacado proyectos “atentos al contexto, a la estrategia y al oficio, en diálogo con el espacio, el tiempo, la materia, el cuerpo y la naturaleza; una arquitectura con un espíritu propositivo, generadora de sistemas más que de objetos”.
